Son ya muchas personas las que conocen de cerca el colesterol alto, sus causas y las consecuencias de salud en que deriva. Los hábitos y cambios en el estilo de vida y alimentación han propiciado que este sea un problema común en la sociedad actual.
En el caso del colesterol, se recomienda tomar un enfoque preventivo: cuidar de la salud antes de que aparezcan niveles preocupantes en el colesterol. No obstante, también hay muchos factores que juegan un papel en reducir los niveles altos de colesterol.
Ya sea por contar con antecedentes familiares o prever una época como el verano (en la que dietas y deporte a menudo no se tienen en cuenta) es conveniente tomar medidas. Hoy hacemos un repaso al colesterol alto: causas y algunos consejos para frenarlo.
Colesterol alto: causas y síntomas
El colesterol alto es una condición caracterizada por niveles elevados de colesterol en la sangre.
Pero, en primer lugar, ¿qué es el colesterol? Se trata de una sustancia cerosa y lipídica que se encuentra de forma natural en todas las células del cuerpo. Es más, el colesterol desempeña un papel importante en varias funciones: desde la producción de hormonas, a la digestión de grasas y la construcción de células.
Es posible que, además, hayas oído hablar de que existen dos tipos de colesterol: el colesterol HDL (lipoproteína de alta densidad o también llamado colesterol “bueno”); y el colesterol LDL (lipoproteína de baja densidad o también conocido como el colesterol “malo”).
Es este segundo, el colesterol LDL el que puede acarrear problemas. Su acumulación en las paredes de las arterias, formando placas, puede obstruir el flujo sanguíneo y aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular. Por el contrario, el colesterol HDL contribuye a eliminar el exceso de colesterol y prevenir su acumulación en las arterias.
El colesterol alto no suele presentar síntomas evidentes. Es por ello que aparece diagnosticado a través de análisis de sangre que miden los niveles de colesterol total, LDL, HDL y triglicéridos.
Respecto al colesterol alto y sus causas, a menudo se origina por una combinación de factores. Además, es conveniente tener en cuenta que cada persona puede experimentar diferentes causas y factores de riesgo. En cualquier caso, las siguientes son algunas de las más comunes:
1. Dieta poco variada
El consumo excesivo de grasas saturadas y azúcares supone una causa común del aumento de colesterol en la sangre. Destacan aquí los alimentos ultraprocesados, ricos en estos ingredientes, así como alimentos procesados y fritos.
A su vez, una dieta poco variada incluye también como fuente de problemas la falta de alimentos ricos en omega-3 (por ejemplo, en pescados grasos). El omega-3 desempeña un papel importante en la salud cardiovascular a través de varios frentes:
- Reduce los niveles de triglicéridos en la sangre
- Disminuye la inflamación
- Aumenta los niveles de colesterol HDL (colesterol “bueno”)
- Reduce los niveles de colesterol LDL.
2. Falta de ejercicio físico
La falta de ejercicio regular puede estar detrás de la disminución de los niveles de colesterol HDL y, a su vez, dificultar el procesamiento del colesterol LDL, provocando niveles más altos de colesterol en general.
3. Factores genéticos
La predisposición genética puede ser también causa de niveles altos de colesterol, incluso desde una edad temprana. En este caso, se habla de hipercolesterolemia familiar como un trastorno hereditario.
4. Enfermedades y condiciones médicas
Diabetes, hipertiroidismo, trastornos de hígado o insuficiencia renal crónica pueden contribuir al colesterol alto.
5. Edad y género
Las personas mayores son más propensas a presentar niveles más altos de colesterol. A su vez, en el caso de las mujeres, los niveles de colesterol en las mujeres pueden aumentar después de la menopausia.
6. Consumo de tabaco
Fumar tabaco disminuye los niveles de colesterol HDL y, a su vez, daña las paredes de las arterias, lo que puede desembocar en riesgo de acumulación de colesterol.
Consecuencias del colesterol alto
El colesterol alto, especialmente cuando se mantiene en niveles elevados durante un período prolongado, puede tener consecuencias diversas (y, en ocasiones, graves) para la salud.
Quizás la más destacada y en la que más se incide es el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Las placas de colesterol LDL acumuladas en las arterias tienden a estrecharlas, restringiendo el flujo sanguíneo. Así, pueden estar detrás de enfermedades cardíacas graves, incluyendo la angina de pecho, los ataques cardíacos y los accidentes cerebrovasculares.
Pero hay más: hipertensión, aterosclerosis (estrechamiento y endurecimiento de las arterias), la enfermedad de la vesícula biliar o las afecciones renales son otras de las consecuencias de un colesterol alto y sin control.
Consejos para reducir el colesterol alto
Las personas con colesterol alto deben consultar a su médico para recibir un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento individualizado.
En cualquier caso, los siguientes son algunos de los cambios en hábitos y estilo de vida que a menudo se prescriben para controlar el colesterol alto y sus causas:
1. Adopción de una dieta saludable
Ante un diagnóstico de colesterol alto, es clave realizar modificaciones en la dieta. Algunos alimentos que incorporar a esta nueva forma de aproximarse a la comida incluyen frutas, verduras, granos enteros, legumbres, pescado y alimentos bajos en grasas saturadas y colesterol.
Por otro lado, será clave limitar el consumo de carnes rojas, alimentos fritos y alimentos procesados. También se recomienda limitar el consumo de alcohol, que causa un aumento en los niveles de triglicéridos.
A su vez, se recomienda optar por el consumo de grasas saludables, como aceite de oliva, aguacate y frutos secos; e incrementar la fibra soluble como avena, cebada, o legumbres.
La incorporación de fuentes de omega-3 es también una pauta a seguir, por su capacidad de aumentar los niveles de colesterol HDL (colesterol “bueno”) y reducir los niveles de colesterol LDL.
Además, la suplementación orientada a mantener un peso saludable o cuidar del hígado pueden ser de utilidad.
2. Actividad física regular
A través de la realización de ejercicio aeróbico (caminar, correr, andar en bicicleta o nadar) es posible aumentar el colesterol HDL (el “bueno”) y mejorar la salud cardiovascular en general.
3. Dejar de fumar
Pese a que se trata de un hábito difícil de eliminar, saber del papel del tabaco en la disminución de los niveles del colesterol HDL puede ser un buen aliciente para dejar de fumar.
4. Controla el estrés
Los niveles altos de colesterol también pueden verse afectados por el estrés crónico. Por ello, es vital encontrar formas saludables de manejar el estrés: desde técnicas de relajación, a la meditación y yoga.
El papel del krill en la reducción del colesterol
El krill es un pequeño crustáceo marino que se encuentra en las aguas frías y limpias del antártico. Para quienes se enfrentan a un colesterol alto y sus causas supone un aliado crucial debido a su alto contenido en ácidos grasos omega-3 en forma de fosfolípidos.
Estos componentes presentan la capacidad de aumentar los niveles de colesterol HDL (“bueno”) y reducir los niveles de colesterol LDL (“malo”).
En este sentido, los complementos Arkosterol® Aceite de Krill, a base de Krill contribuyen al funcionamiento normal del corazón y podrá ser beneficioso para el colesterol alto.
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