Cada año probamos cientos de materias primas crudas, como la manzana, la avena, el trigo sarraceno, la harina de plátano, etc. Para sustituir cualquier material sintético de nuestras fórmulas.Gracias al trabajo de nuestros investigadores, descubrimos que estas materias primas poseían intrínsecamente propiedades tecnológicas que, mezcladas con nuestros principios activos, podían conferir propiedades técnicas al producto, permitiendo darle su forma final. Este trabajo se patentó en julio de 2018.
"Para garantizar la estabilidad de estas formulaciones, también hemos desarrollado métodos predictivos de estabilidad, lo que nos permite ofrecer a nuestros consumidores productos seguros, eficaces y naturales hasta su caducidad."
Chantal Hombourger, Directora de Desarrollo Galénico de Arkopharma.