La sensación de piernas pesadas es muy común y afecta más a las mujeres, aunque los hombres no se salvan. De hecho, según los estudios, más de nueve millones de personas en España sufren estas molestias. Se trata de un problema muy desagradable, que incluso puede afectar a la vida diaria. ¿Cómo puedes mejorar la circulación de las piernas? Afortunadamente, existen muchas soluciones naturales que, combinadas con un estilo de vida más saludable, te ayudarán a sentir tus piernas más ligeras.
Piernas pesadas, un problema que no debes tomar a la ligera
Cuando piensas en mejorar la circulación de las piernas es porque estás percibiendo una incómoda sensación de pesadez y cansancio, a veces acompañada de hormigueo, dolor e hinchazón de los tobillos y las pantorrillas. Estas molestias están originadas por un problema de retorno venoso: la sangre, después de ser distribuida a todos los órganos y tejidos a través de las arterias, regresa al corazón a través de las venas. Sin embargo, a diferencia de las arterias, las venas no tienen la capacidad de contraerse para ayudar a que la sangre fluya hacia el corazón.
En condiciones normales, las venas tienen válvulas para evitar que la sangre regrese hacia las extremidades. Sin embargo, con el síndrome de las piernas cansadas, el retorno venoso se complica cuando este sistema "antirreflujo" se debilita por diferentes factores, como la edad, el sobrepeso , cuestiones hormonales, los hábitos de vida, las condiciones climatológicas, etc. De hecho, es más frecuente su aparición en personas sedentarias o que se ven obligadas a permanecer de pie durante mucho tiempo. Ten en cuenta que la presión de las plantas de los pies y la contracción de los músculos de la pantorrilla y los muslos al caminar ayudan a que la sangre fluya hacia el corazón. Además, el calor agudiza el problema, al dilatar las venas; por ello, en verano es más frecuente padecer esta sensación de pesadez e hinchazón.
Además, si esta mala circulación sanguínea se prolonga en el tiempo, las molestias pueden derivar en patologías más serias. Entre ellas se encuentran problemas como varices y arañas vasculares, hematomas, cambios en el color de piel y uñas, ulceraciones o trombosis. De ahí que no debas tomar a la ligera este problema y sea recomendable adoptar pautas para mejorar la circulación de las piernas.
¿Cómo mejorar la circulación de las piernas rápidamente?
Prácticas que ayudan a reducir naturalmente la sensación de piernas pesadas
¿Qué puedes hacer ante esta situación? Realizar ejercicio físico. Simplemente caminar a buen ritmo es beneficioso en caso de piernas pesadas. Con esta actividad física podrás mejorar la circulación sanguínea de las piernas al impulsar la sangre desde las venas de las extremidades hasta el corazón a medida que los músculos de la pantorrilla se contraen. Lo ideal es caminar por lo menos 20 minutos al día de una sola vez y apoyando bien el talón primero. Otros deportes recomendados son la natación, el aquagym o la bicicleta. En cambio, es mejor que evites las prácticas deportivas de impacto, como el jogging o el tenis.
También debes tener en cuenta que los períodos prolongados de inmovilización son perjudiciales para la circulación sanguínea. Por lo tanto, si pasas muchas horas sentado frente al ordenador o viajando en avión, levántate regularmente para dar algunos pasos. Evitar cruzar las piernas y hacer movimientos regulares de flexión-extensión de los tobillos también son prácticas que aliviarán las molestias rápidamente.
Cuando estés acostado, es recomendable que eleves las piernas, por ejemplo, poniendo un cojín debajo, y las masajees para propiciar el flujo sanguíneo. Esto facilitará el regreso de la sangre al corazón. Otro consejo: evitar los baños calientes, saunas y baños de vapor. Por el contrario, terminar la ducha con un chorro de agua fría, partiendo de los pies hasta la parte superior de los muslos, revitalizará el flujo sanguíneo.
La alimentación también es importante para mejorar la circulación de las piernas. No se trata de seguir un régimen estricto, sino de evitar el sobrepeso, dado que el tejido graso sobrante perjudica el buen retorno venoso. Los nutricionistas recomiendan también dar prioridad a los alimentos ricos en vitaminas E y C y en selenio. En este sentido, los frutos secos (nueces, avellanas, almendras…), el aguacate y las aceitunas son ricos en vitamina E. Por su parte, el marisco, el pescado azul (sardina, salmón, caballa), el hígado y los riñones contienen selenio. Las frutas frescas, especialmente bayas y cítricos, te darán el aporte de vitamina C necesario para tu salud vascular. Inclúyelos regularmente en tu menú y recuerda beber agua con regularidad, sobre todo en verano.
Situaciones que debes evitar para no sufrir pesadez en las piernas
¿Y de qué hábitos debes deshacerte para mejorar la circulación de las piernas? Sentarte o permanecer en pie durante mucho tiempo. También usar ropa apretada (pantalones apretados, por ejemplo) o zapatos con tacones demasiado bajos o demasiado altos. A su vez, exponer en exceso las piernas a la luz del sol o a fuentes de calor o tener exceso de peso es otro factor de riesgo para sufrir pesadez e hinchazón en las extremidades.
Además, debes evitar el tabaco y el alcohol, pues actúan como vasodilatadores y dificultan el retorno de la sangre al corazón. Huye también de alimentos que son conocidos por su efecto negativo en la circulación, como determinadas especias, café y té, además de ultraprocesados y azúcares.
¿Qué plantas ayudan a mejorar la circulación de las piernas?
Junto a esta lista de consejos, algunas plantas tienen la capacidad de fortalecer el tono venoso por su alto contenido en flavonoides y pigmentos vegetales. Por eso, incluirlas en tu dieta puede ser de gran ayuda para mejorar la circulación de las piernas. Una de las más efectivas es, sin duda, la Vid roja. La Vid roja cuenta con beneficios establecidos en la circulación sanguínea, especialmente las hojas de la variedad denominada “de los tintoreros”. Estas hojas contienen taninos, numerosos flavonoides, así como pigmentos antociánicos. Varios estudios han demostrado que su consumo promueve un buen flujo sanguíneo y ayuda a reducir la sensación de piernas pesadas y cansadas.
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